jueves, 29 de agosto de 2013

"Septiembre 2013"

¡¡Vuelta al colegio, al trabajo y al mundo de los cuentos!!!

Que ganas tenía de colocar mi pequeña agenda de actividades cuenteras, ¡¡¡Yujjjjuuuuuu!!!
Éste cuatrimestre último del año será bueno para mi, o eso espero.

Peque-cuenteros...ainss..mis amig@s de felicidad inagotable, del pozo de la fantasía, que me inyectan energía, ilusión  para seguir cada día en el maravilloso mundo de los cuentos.

Dentro de poco decimos adiós al verano, a las tardes-noches en terrazas, a fiestas estivales y cenas en azoteas con amigos. Pero dejando la  melancolía atrás, os diré que os reservo asiento en mis contadas por espacios culturales, cafeterías, bibliotecas y tiendas educativas...

Por aquí andarán mis pisadas:

-14 de septiembre, 12:00 horas, Baobab aprender jugando, Los Remedios, Pinta-cuentos "El árbol de la risa".

-21 de septiembre, 12:00 horas, AzarbeEducativosSevilla, Cuentacuentos "Banquete de cuentos".

-28 de septiembre, 12:00 horas,  Baobab aprender jugando, Nervión, Pinta-cuentos "El árbol de la risa".


Besos y feliz lectura.


jueves, 22 de agosto de 2013

"Os traigo un cuento nuevo"

¡¡Buenos días amig@s y amantes de los cuentos!!

Contenta y feliz que estoy porque os traigo un nuevo cuento que he escrito, se llama "Tito, mi gran amigo". Un cuento emotivo, tierno y con el valor de la amistad muy aflote.
Lo he escrito para el concurso de cuentos: El árbol de los chupetes de Badajoz.


Solo necesito una llamada a través de mensaje privado de mi amiga Bego Guerrero de El baul de Bego, animándome y... voila,  por mas que reniego a presentarme... por mas trabajo que tengo... mi imaginación me juega una mala pasada y ya no hay otra cosa que la fantasía de un árbol, el llanto de un peque, un amigo inseparable... los dedos se estiran haciendo ejercicios, mi cabeza da vueltas atrapando ideas colgadas de mi imaginación y un poco de aquí, un poco de allá y sin quererlo ya estoy enviando el cuento...arrggg, pensé que tenía mas autoridad mental. 


En fin, espero que os guste mi cuento y que disfrutéis con él, y si os ayuda en la etapa del destete del chupete me sentiré mas que afortunada.
Podéis entrar en la página: El árbol de los chupetes de Badajoz desde aquí, podéis ir mirando todo lo que se va cociendo para el gran día. 
También os dejo este enlace para que podáis disfrutar de todos los Cuentos que se han presentado para la inauguración.
Y aquí tenéis  las VOTACIONES puesto que muchos tienen problemas para acceder desde su móvil o bien limitados por internet.
De antemano os agradezco vuestro voto y vuestra confianza en mí.

¡¡Besos llenos de magia!!






"Tito, mi gran amigo"

Tito, mi gran amigo
Por Pilar Redondo Benítez

¡¡Hola soy Emma!! Hace mucho tiempo tuve un chupete que me aliviaba mis pequeñas y doloridas encías. Éste era de caucho, grande, feo y orondo, su color: entre un marrón anaranjado o amarillo viejo, viejo, viejo... Pero era mi mejor amigo, lo mejor que me habían regalado cuando era pequeña.


A veces, mi hermano Theo intentaba quitármelo por las noches, y yo me despertaba con un vacío grande y seco en mi boca. Lloraba hasta que en décimas de segundos volvía mi amigo fiel e inseparable.  Y solo entonces volvía a conciliar el sueño.
Otras, en cambio, jugábamos al escondite mientras él se ocultaba en mi cajón de muñecas y tazas de té, o entre los barrotes de mi cuna niquelada. Siempre estaba allí, para consolarme, para protegerme, para aliviarme. 
Así fue como "Tito" -así llamaba a mi chupete porque cuando era pequeña me costaba decir chiquitito- y yo, fuimos amigos.
A mi mamá y a mí nos gustaba ir todos los días al parque, a pasar las tardes rodeadas de sus hermosas fuentes, a escuchar el canto de los pavos reales, a dar de comer a los patos, y como no, a  pasear entre sus frondosos árboles y palmeras.
Pero un buen día cuando yo tenía 2 añitos y algunos meses, perdí a mi amigo Tito en el parque. Sin darme cuenta ya no lo chupaba, estiraba y mordisqueaba como antes. Pero me encantaba tenerlo en mi boca y sentirme segura con él.
Entonces Mamá y yo lo buscamos por todas partes pero sin éxito alguno. Lloraba desconsolada porque sin él no podía estar. Fuimos al puesto de información por si algún turista lo había visto y dejado, también nos acercamos a los quioscos de la zona pero nadie sabía nada de mi chupete.
Lloré, lloré y dejé derramar mis lágrimas y mis babas que me colgaban de mi boca e iban descansando en un trocito de tierra blanda y fértil del parque. Por cada gota caída en el suelo saltaban granitos de arena hacia arriba, formando pequeños charquitos bajo mis pies. Allí solía jugar y pasar mis horas divirtiéndome con él. Cerca había un banco de piedra gris oscuro donde mi mamá pasaba largas horas mirándome. Algo insólito iba a suceder en ese preciso momento, pero mi tristeza por la pérdida de Tito, empañó lo que delante de mí comenzaba a aparecer y mis ojos no lograban ver.
Se hizo de noche y ya no quedaba sitio por el cuál buscar y ni gente a la que preguntar. Con los ojos llorosos, rojos y doloridos me fui a mi casa en brazos de mi madre.
Aquella noche mi padre me trajo un regalo.
-"Mira cariño, te traigo un regalo muy especial, ¿quieres abrirlo?"
No estaba yo por la labor, pero un regalo es un regalo...
Así que lo abrí y mi sorpresa es que mi padre me había regalado un sustituto de mi amigo Tito.
Le di las gracias pero no me lo metí en la boca, no compartí con él mis encías, no durmió conmigo, pero sí lo dejé en su cajita para que nunca me olvidara de mi viejo amigo.
No quise pisar el parque durante algunos años, hasta que un buen día escuché hablar de un magnífico árbol el cuál había crecido en mi parque preferido, ¡¡¡un árbol muy especial!!! - decía la gente.
Mis padres y yo fuimos a visitarlo, recorrimos todos los caminos, fuentes, estanques hasta que vimos el árbol más bonito y con el color entre un marrón anaranjado y un amarillo viejo, viejo, viejo.
Me fui acercando poco a poco y me di cuenta que el árbol tenía la forma de chupete.
En ese momento comprendí que el árbol que tanto hablaba la gente había crecido en el lugar donde yo solía pasar largas horas jugando y masticando a mi amigo Tito.
Alcé la mirada y me encontré a mi fiel amigo, feliz y contento meciéndose en una de las ramas, y a su lado muchos chupetes como él. 
Con el paso de los años los niños y niñas de la ciudad iban a visitarlo y le dejaban su bien más preciado cuando ya les habían salido todos los dientes.
Por cada chupe que se colgaba, el árbol se hacía más fuerte y robusto, crecía y crecía, y sus ramas cada vez más repletas de chupetes, bailaban al son del viento, componiendo melodías para los que allí se acercaban a dejar a su amigo de la infancia.
Entonces pensé que se alimentaba de las babas y del cariño de cada uno de los niños y niñas de la ciudad.
Así fue como mi amor por Tito creció en forma de árbol de los chupetes.

...Y colorín colorete se acabó la historia del árbol de los chupetes...



sábado, 17 de agosto de 2013

"Vuelta el correo agradable"

Buenos días amig@s y amantes de los cuentos!!!

Como siempre, el señor de correos en muy bienvenido a nuestra casa. Siempre trae una buena sonrisa y eso, que ademas de traer el paquete, tiene que subir 2 plantas hasta llegar a casa, sin contar el laberinto que hay que pasar para subir. Uffff....resoplando y tomando aire se queda en la terraza a veces...
Pues nada mas llegar de trabajar me encontré con un sobre que provenía de nuestros amigos La colina de Puck,  siempre es bien recibido sus cartas porque dentro de ellas se esconden pequeñas maravillas de duendes, siempre hechas a mano.

 

A la familia cuentera nos encanta las manualidades, nos divertimos trabajando con las manos y fabricando y recomponiendo cosas. Sabemos lo que cuesta hacer un detalle y el tiempo empleado, con lo cual son muy valoradas en nuestro hogar.

Pues muy bien amig@s cuenteros siguiendo mi rutina con la correspondencia deseada, le hago una foto, dos, tres, cuatro, hasta que me guste como ha quedado, luego la abro con impaciencia por el tiempo que me ha llevado en hacer las fotos. Con el cuidado innecesario por rasgar el sobre y buscar dentro el ansiado regalito.

 Ahhhhhh... Que maravilla!!! Es un prendedor con la forma de un trébol de color verde, suave al tacto y con la delicadeza en la que está formado por  manos de duendes.





Mirar que hermosura y con la elegancia que está en su papel, ¿entendéis porqué me encantan los regalos de los amigos duendes?. Éste regalo ha sido un detalle de la colina de Puck, por  acertar  Adivina quién...   del mes de agosto. Es un juego en el que puede participar toda la familia, a mis peques les encanta e intentamos no perdérnoslo. Arriba os he dejado el enlace en el cual ellos los explican genial...
Gracias de nuevo a la colina de Puck por hacer tan divertido y cultural su blog. Detrás de cada uno de sus post es una aventura nueva, diferente y llena de intriga.


¡¡¡Besos con suerte!!!